Bulgaria recibe a los visitantes con los brazos abiertos, ofreciendo una notable diversidad que incluye playas soleadas, lagos, retiros de bienestar y excelentes estaciones de esquí. Bulgaria brinda oportunidades para unas vacaciones buenas, económicas e interesantes. Los senderos turísticos del país están llenos de lugares emblemáticos y su clima es ideal para el ocio durante todo el año. Este país es conocido no solo por sus playas vírgenes y soleadas laderas montañosas, sino también por sus numerosos lugares que vale la pena visitar. Pasea por las encantadoras calles casi medievales de Nessebar, visita su anfiteatro romano, cuenta la cantidad de iglesias familiares dentro de sus murallas y explora los vestigios del dominio del Imperio Otomano en tiempos antiguos. Conoce las modernas ciudades de Varna y Burgas mientras disfrutas de algunas compras. Disfruta de los increíbles alrededores del Lago Pomorie, escucha los sonidos de las aves raras que anidan en sus orillas. Visita el Palacio de Alexander Nevsky y la Rotonda de San Jorge, hitos de la actual capital de Bulgaria, Sofía. Y no olvides degustar los vinos en las salas de cata del Jardín Botánico de Balchik, pasear por el Valle de las Rosas y tomar una foto con la Fortaleza de Tsarevets en Veliko Tarnovo como telón de fondo.
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Bulgaria
La soleada diversidad de los Balcanes
Mar cálido, sol suave, naturaleza hermosa, gente hospitalaria... Así es Bulgaria como destino turístico, donde los visitantes siempre son bienvenidos. Playas limpias y el Mar Negro cristalino en verano, impresionantes estaciones de esquí en invierno. Nessebar para los románticos, Pomorie para las familias, Sunny Beach para los fiesteros, Bansko para los amantes de la aventura... y estos no son todos los pueblos turísticos en Bulgaria.
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