Uno de los destinos turísticos más populares de Marsella es pasear por el Puerto Viejo. Puede empezar visitando el mercado, donde se vende todo tipo de marisco: ostras, mejillones, cangrejos y mucho más. Por cierto, su compra también se cocinará aquí si lo desea.
Continúe hasta los fuertes de San Nicolás y San Juan, y después asómese a la bahía donde antaño atracó Francis Drake, el pirata favorito de la reina Isabel. Puede terminar este itinerario marsellés en el norte del Puerto Viejo con una excursión a la Basílica du Nord-Dame de la Garde, al este, una subida al bulevar de la Canbrière o un paseo en barco.
Una interesante ruta a pie por Marsella comienza en Aviñón — la “residencia de los papas romanos”. Fue aquí donde, temiendo persecuciones políticas, el papa Clemente V se refugió en 1309. Desde entonces, siete papas ocuparon el trono sagrado en esta ciudad.
La caminata debe empezar en el Palacio de los Papas, luego dirigirse a la Catedral de Notre-Dame-des-Doms (Catedral de Aviñón) y admirar la silla episcopal de mármol blanco. Descanse en el hermoso parque Rocher des Doms y continúe el recorrido paseando por la ribera del río Ródano. Su viaje terminará en la plaza central de la ciudad.
Otros dos recorridos a pie por Marsella que dejarán impresiones inolvidables:
La Fuente de las Cuatro Naciones en Cassis — la fortaleza Castrum — la carretera de las Crestas (mejor en coche, pero también posible a pie con paradas) — el acantilado “Corona de Carlomagno” — miradores panorámicos.
Paseo por el Palacio Longchamp con visitas al Museo de Historia Natural y al Museo de Bellas Artes, al Jardín Zoológico y al Observatorio, además de contemplar la fuente central, el Arco del Triunfo y las columnatas.