La capital de España tiene una superficie de 607 km² y está situada en la parte central de la Península Ibérica, a sólo 10 km del Cerro de los Ángeles, que es el centro geográfico del país. El pequeño río Manzanares atraviesa la ciudad.
Al norte de la capital se encuentra la Sierra de Guadarrama, donde hay pistas de esquí y acogedoras estaciones. También hay muchos lugares de interés repartidos por Madrid, como el Palacio del Escorial, el Valle de los Caídos, el Palacio de El Pardo y la residencia real de verano de Aranjuez.
La población de Madrid supera los 3 millones de habitantes, lo que la convierte en la ciudad más grande del país. La mayoría de los residentes son católicos, pero Madrid cuenta con un número cada vez mayor de emigrantes procedentes de países árabes.
Madrid fue fundada por el emir de Córdoba, Mohamed I, en el siglo IX como fortaleza para defenderse de los cristianos. No fue hasta finales del siglo XI cuando la ciudad fue reconquistada a los musulmanes, y la fortaleza local se utilizó como residencia temporal de los reyes españoles.
En 1561 Madrid fue proclamada capital del Estado español, lo que propició un rápido crecimiento demográfico y un gran desarrollo de la construcción urbana. Durante la época borbónica se aprobó el desarrollo planificado de la ciudad, que dio lugar a las Reales Fábricas, las Academias y la Real Biblioteca.
A mediados del siglo XIX, tras el derribo de la muralla medieval, el territorio de Madrid comenzó a dividirse en tres zonas: la parte histórica, la zona de expansión y la zona suburbana.