Planear unas vacaciones con niños en Marruecos puede ser una experiencia maravillosa, siempre que se elija el momento y el destino adecuados. Septiembre, cuando el calor disminuye y las aguas del océano se calientan cómodamente, es una opción excelente.
Para disfrutar de unas vacaciones de playa en familia en Marruecos, piense en destinos como Tánger, con acceso al Mediterráneo, la tranquila laguna de Oualidia o la más occidentalizada Agadir. Estos lugares ofrecen las condiciones ideales para que usted y sus pequeños disfruten de un baño seguro y agradable.
Aunque hacer turismo no sea el objetivo principal de un viaje familiar con niños, exponerles a la cultura y el ambiente únicos de Marruecos puede ser una experiencia gratificante. Un aspecto que los niños suelen adorar es la gran variedad de dulces marroquíes.
Los mejores lugares para pasear durante unas vacaciones con niños en Marruecos se encuentran en los parques. Por ejemplo, el Parque de la Liga de Estados Árabes en Casablanca atrae con sus alamedas sombreadas. Además, una gran parte de este parque está ocupada por el parque de atracciones Yasmina, que seguramente encantará a los pequeños viajeros. El acceso a Yasmina está disponible de 10:00 a 19:00, y el precio de entrada durante las vacaciones en Marruecos con niños es de 150 MAD.
También es interesante visitar con los más pequeños el Parque de las Aves en Agadir, donde, además de las aves, se pueden encontrar muchos otros animales. Además, el parque cuenta con una zona de juegos con arenero.
Los Jardines de Menara en Marrakech son ideales para descansar y refugiarse del calor, además de admirar los increíbles ejemplos de flora marroquí.
Marruecos, a diferencia de otros países musulmanes, es uno de los más tolerantes con los turistas. Por lo tanto, es un destino seguro para viajar con niños.