1. Entre otros países musulmanes, Marruecos destaca por su actitud extraordinariamente amistosa hacia los turistas. No hay zonas prohibidas para los extranjeros, se puede vestir como se quiera y se puede beber vino o bebidas más fuertes en los cafés para visitantes del país.
2. Puedes llevar a Marruecos cualquier cantidad de dinero en dólares, euros o en la moneda de tu país. Pero tendrás que cambiarlo por dinero local, ya que es el único válido en el país.
3. Si llevas más de 48 horas en Marruecos, puedes volver a cambiar moneda local por moneda extranjera. Pero no más del 50% de la cantidad que cambiaste por moneda local cuando llegaste. Pero si llevas menos de 48 horas en Marruecos, te devolverán hasta el 100% de la moneda local.
4. En Marruecos no se puede filmar ni a las fuerzas del orden ni a los edificios administrativos. Si decides filmar a algún lugareño, merece la pena preguntarle su opinión al respecto. Y, si tu modelo al azar está de acuerdo, lo mejor es pagarle entre 2 y 5 MAD por el rodaje.
5. No escandalice a la población musulmana de Marruecos con atuendos demasiado reveladores por las calles de las ciudades. Esto es especialmente cierto para el sexo débil. Los pantalones cortos y los bañadores sólo son apropiados en la playa.
6. Beba alcohol sólo en los cafés turísticos. Aparecer en la calle con alcohol será tenso.
7. Si no sabe de antemano en qué hotel se alojará, puede dejar los datos sobre cualquier hotel del centro de la ciudad en la declaración de llegada a Marruecos. Los funcionarios marroquíes no son muy quisquillosos a la hora de comprobar este punto.
8. Si decide viajar entre las ciudades en un vuelo nacional, sepa que no puede perderse Casablanca. Todos los vuelos locales pasan por su aeropuerto.
9. No hay por qué temer al ferrocarril en Marruecos. Aunque es un país meridional, el servicio es de primera y es una de las mejores formas de viajar allí.
10. Cuando vaya a Marruecos, merece la pena aprender algunas frases en francés. Es el idioma que más se habla aquí. Sobre todo para comunicarse con los turistas.