Estrasburgo está situada en el territorio de Alsacia, donde la cocina nacional de Francia ha sufrido una importante corrección por parte de las tradiciones culinarias de Alemania. Por eso, sus ingredientes principales son las patatas, los huevos, la col, la carne de animales de granja y las aves de corral.
Los restaurantes suelen servir salchichas, jamón de cerdo con chucrut. A menudo, estos ingredientes se preparan con exquisito ingenio francés. El Baeckeoffe, por ejemplo, se elabora con carne de cordero, ternera y cerdo en vino alsaciano con patatas.
Los platos tradicionales de Estrasburgo también incluyen opciones más "francesas": carne de caracol, foie gras, salsa marinera y pasta casera.
La piedra angular de la cocina alsaciana es la repostería. Merengues, bollos, tartas, magdalenas navideñas, pretzels - y todo ello con las más diversas variantes de sabor. Los restaurantes locales son famosos por el vino caliente, el brandy y, por supuesto, la cerveza.