Para que su viaje a Sri Lanka no sólo sea seguro, sino también realmente cómodo, siga atentamente estas normas:
- Los trenes y autobuses de Sri Lanka casi nunca tienen aire acondicionado, por lo que conviene tenerlo en cuenta antes de viajar.
- La estación de Colombo tiene tres aseos: uno para hombres, otro para mujeres y otro para extranjeros. El aseo de extranjeros está cerrado con llave, que se puede obtener de un vigilante en una sala habilitada al efecto. Suele ser más limpio y cómodo.
- En las carreteras de Sri Lanka, un elefante o una vaca pueden salir a la calzada en cualquier momento. Aunque hay que tener cuidado con los elefantes, es aconsejable ceder el paso a las vacas, ya que aquí se consideran sagradas.
- Para asistir a festivales religiosos, es aconsejable informarse en el lugar para asegurarse de no interrumpir inadvertidamente los rituales de la población local.
- En Sri Lanka, poca gente habla inglés; la lengua predominante es el cingalés.
- Tenga cuidado si se aloja con lugareños, ya que pueden entrar hormigas y otros insectos en su habitación.
- Los autobuses en Sri Lanka suelen estar abarrotados, así que prepárese para viajes repletos.
- Frente a las costas de Sri Lanka se pueden avistar ballenas azules y cachalotes.
- En lo que respecta a las normas de circulación en Sri Lanka, los lugareños suelen hacer caso omiso de las normas de tráfico. Es aconsejable evitar alquilar un coche. Sin embargo, alquilar una scooter puede ser una opción cómoda.
- Para coger un taxi en Sri Lanka, la opción más cómoda es utilizar un "tuk-tuk", que es un scooter con una pequeña furgoneta.
