La capital de Eslovenia es una ciudad pequeña y compacta, por lo que los turistas frugales pueden recorrerla incluso a pie. Pero si viene con niños o no entra en sus planes dar largos paseos, el cómodo transporte público de Liubliana está a su servicio. La infraestructura de transporte de la ciudad está representada por autobuses y servicios de taxi.
Para hacerse una idea aproximada de cuánto le costará un trayecto en taxi, haga unos cálculos sencillos: sume el kilometraje multiplicado por 1,5 EUR a 2 EUR por embarque. Así, por 10 kilómetros de viaje en un coche alquilado a un servicio local de taxis (como Taxi Liubliana o Taxi Metro), pagará unos 17 EUR.
Necesitará un billete de autobús si va a visitar las zonas periféricas o las ciudades vecinas (la estación de autobuses ofrece 20 rutas dentro y fuera de la ciudad). Los precios de los billetes varían en función de la distancia, pero en general los servicios de transporte son bastante asequibles (desde 1,20 EUR por un viaje de 90 minutos).
Transporte local
La ciudad también cuenta con un funicular, visita obligada para todo turista. En la cima del funicular se encuentra uno de los miradores más cómodos. El funicular lleva desde la plaza Krek hasta el famoso castillo de Liubliana. Puede comprar un billete de ida (2,2 EUR) o de ida y vuelta (4 EUR). La subida de 70 metros dura 10 minutos. Tenga en cuenta que el horario del teleférico varía según los meses.
Los trenes a los países europeos vecinos salen de la estación de Liubliana (para direcciones, horarios y precios, consulte aquí).