Los viajeros que visitan los restaurantes de Liubliana dejan comentarios positivos tanto sobre la comida como sobre los precios y el servicio local.
Para probar platos eslovenos, diríjase a los restaurantes de cocina nacional (aquí se llaman gostilna). Por suerte, hay muchos de estos establecimientos en Liubliana.
Los platos locales satisfarán incluso al gourmet más exigente. Pruebe la sopa de carne de res (goveja juha), el caldo de pollo con fideos. Como plato principal, puede pedir algo de carne: jamón curado (pršut), čevapčiči — salchichas con cebolla o rábano picante, brochetas (ražnjići), goulash (bograč), o pimientos rellenos.
Los amantes de los mariscos seguramente disfrutarán del pilaf esloveno — arroz con cangrejo, gambas y mejillones, así como calamares rellenos de queso y jamón.
No pierda la oportunidad de probar los deliciosos productos de panadería locales. Entre ellos, el palačinka — crepes con crema de nueces y nata, potica — un rollo de nueces, gibanica — un pastel caliente con manzanas y queso, zavitek — la versión local del strudel y muchas otras delicias.
Es imposible enumerar todas las delicias de Liubliana en un solo artículo. Así que visite la capital de Eslovenia y forme su propia opinión sobre la cocina local.