La ciudad cautiva a primera vista: basta con ver las fotos de los monumentos de Funchal. La zona de parques es especialmente impresionante.
Por ejemplo, la finca Palheiro, construida en la época colonial. Su principal atractivo es el parque, que posee una de las mayores colecciones de plantas exóticas de todo el mundo. De hecho, hay cuatro jardines temáticos: Francés, hundido, jardín de la dama y rosaleda. La entrada a la finca está prohibida (es propiedad privada), pero se puede pasear por el parque todo lo que se quiera (el precio de la entrada es de 10 EUR).
Jardín Botánico de Madeira (Jardins Botanicos da Madeira). La superficie total es de 8 hectáreas. En su territorio crecen unas 3000 especies de plantas de diferentes partes del mundo y unas 200 endémicas, que sólo se pueden encontrar en Madeira, 300 loros de diferentes especies. Aunque, para ser sinceros, ¡¡¡toda la isla es un enorme jardín botánico en sí misma!!! Desde el centro de la ciudad hasta el jardín se puede llegar en teleférico o en autobús. Por cierto, las mejores fotos panorámicas de Funchal se obtienen desde este lugar.
Jardín de orquídeas (Jardim orquídeas) fue creado a principios del siglo XX. De hecho, es un gran invernadero, donde se mantienen las condiciones de la selva tropical: un determinado régimen de temperatura, humedad y luz. Aquí se pueden comprar semillas, bulbos o crías de plantas.
La Catedral Se construyó en el siglo XVI. Su principal atractivo es la fachada de color marrón rojizo, para la que se utilizó un tipo de basalto poco común.
Fortaleza-Santiago (Fuerte de Sao Tiago) - un fuerte situado al final del paseo marítimo, construido a principios del siglo XVI. Debe su nombre al patrón de la ciudad, el apóstol Santiago el Joven, también llamado Santiago Althea. Hoy alberga el Museo de Arte Moderno y un restaurante.
En los alrededores de la ciudad también hay muchas atracciones interesantes que podrás visitar durante excursiones. Por ejemplo, en un desfiladero montañoso cerca de Funchal se encuentra el Valle de las Monjas, un pintoresco pueblo con numerosas casas diminutas. Incluso aquellos que han visitado Funchal varias veces se sorprenden de cómo estas viviendas se han mantenido en las empinadas laderas durante siglos.
Otro lugar popular es Câmara de Lobos, que fue visitado por Winston Churchill. Este pequeño pueblo también es famoso por albergar el segundo acantilado más alto del mundo, el Cabo Girão (Miradouro do Cabo Girão), con una altura de 580 metros.
