Como pequeña ciudad balneario, puede que Ein Bokek no tenga muchos monumentos famosos, pero su impresionante historia, en la que se refugiaron Jesucristo y el rey Herodes, convierte el terreno en el que se asienta el balneario en una importante atracción.
Lo más popular entre los turistas es la Fortaleza de Massada, construida antes de Cristo por el propio rey Herodes. Este lugar se convirtió en el último refugio de los fanáticos judíos. Tras tres años de asedio, algunos de los 960 hombres, mujeres y niños prefirieron acabar con sus vidas antes que rendirse a los romanos, que destruyeron Jerusalén. Rodeada de escarpados acantilados, la fortaleza parece inexpugnable y majestuosa. Sólo se puede acceder a ella desde un lado por el "camino de la serpiente" o en teleférico.
Al describir las vistas de Ein Bokek, los guías locales prestan especial atención al monte Sodoma, hecho de sal gema. La historia bíblica cuenta que fue aquí donde la ira de Dios descendió sobre las ciudades de Sodoma y Gomorra en forma de lluvia de azufre y fuego, y la mujer de Lot se convirtió en una estatua de sal. De hecho, hay una estatua de una mujer hecha de sal que ha sido captada en fotografías de lugares de interés de Ein Bokek, y muchos creen que representa a la mujer de Lot mirando hacia atrás, hacia la ciudad en ruinas.
El mapa turístico de Ein Bokek también señala a los turistas la Reserva Nacional de Ein Gedi. La entrada cuesta 25 ILS y da derecho a visitar también la sinagoga. Los niños acompañados de un adulto reciben una entrada con descuento.
Al describir los lugares de interés de Ein Bokek, no se puede dejar de mencionar Nahal Bokek, un manantial que fluye por un hermoso cañón de naturaleza pintoresca y manantiales curativos.
Los lugares de interés de Ein Bokek con nombres históricos incluyen los restos de un puesto romano-bizantino, así como las ruinas de la fortaleza de Bekekek. Los historiadores creen que se construyó durante la dinastía asmonea.
