París es quizás la capital más romántica del mundo. Cada año, el 14 de febrero, se llena de miles de parejas enamoradas que planean subir a la Torre Eiffel, cenar en uno de los restaurantes con vistas a los Campos Elíseos y, tal vez, hacer o recibir una propuesta de matrimonio. Los amantes de la moda también vienen aquí, porque ¿dónde, si no en París, vale la pena comprar creaciones de diseñadores famosos con agradables descuentos durante el período de rebajas?
París también es popular entre los gourmets que desean probar sopa de cebolla, ratatouille, caracoles, trufas y otros platos de la cocina francesa en uno de los restaurantes con una larga historia. Y qué decir de la oportunidad de disfrutar de un café y un croissant por la mañana mientras se contempla el paisaje. Si quieres aprender a cocinar platos locales, busca escuelas de cocina y clases magistrales, de las cuales hay bastantes.
Además, en París puedes sumergirte en la atmósfera de tus películas favoritas. Por ejemplo, tomar un café en "Dos Molinos" y ver la casa de Amelie, visitar la iglesia de Saint-Sulpice, donde el asesino del libro "El Código Da Vinci" de Dan Brown buscaba la piedra angular, y no olvides ver un espectáculo en el famoso cabaret "Moulin Rouge", celebrado en muchas películas y musicales. Los guías parisinos ofrecen itinerarios de autor de paseos cinematográficos por la ciudad.