La cocina nacional de Francia encuentra una magnífica expresión en los restaurantes y cafés de La Rochelle. Numerosos y variados establecimientos gastronómicos ofrecen platos tradicionales franceses en La Rochelle. La cercanía al mar otorga un marcado protagonismo a los mariscos y pescados.
En los restaurantes de La Rochelle, es imprescindible probar auténticas delicias de la cocina aquitana, como la lubina en costra de sal marina, las ostras calientes al estilo de Charente, los mejillones a la rochelaise y el famoso plato de mejillones — la éclade.
Ningún viajero que se respete puede visitar La Rochelle sin probar el queso de cabra Chabichou du Poitou. Todos estos refinados platos se acompañan a la perfección con vinos y postres franceses.