El balneario de Évian goza de un clima suave y templado. Las precipitaciones son escasas, y en verano el tiempo suele regalar a los visitantes dos semanas seguidas con temperaturas de unos +25°C.
En invierno, el clima en Évian puede empeorar durante una o dos semanas, aunque el termómetro rara vez baja de +2°C. Sin embargo, si planea subir a las montañas, no olvide llevar ropa de abrigo: allí nieva con abundancia y hace mucho más frío que a orillas del lago.
La mejor época para viajar a Évian es de mayo a septiembre. El calor sofocante no existe en la ciudad, por lo que incluso en julio el tiempo resulta sumamente agradable para pasar varios días.
El buen clima veraniego en Évian permite no solo disfrutar de los paisajes naturales, sino también darse un baño en el lago Lemán. En julio el agua alcanza los +25°C, y en invierno, por cierto, nunca se congela.
Solo después de consultar el pronóstico del tiempo en Évian podrá organizar su viaje y decir con satisfacción: «Voy a Évian». El balneario recibe turistas durante todo el año, así que es prácticamente imposible encontrar una temporada “barata”. Quienes eligen este destino suelen preocuparse poco por los precios.
Si duda entre viajar en otoño o en primavera, tenga en cuenta que en otoño son frecuentes las lluvias y la humedad es elevada. En primavera, en cambio, el ambiente es fresco y de gran belleza.