El pequeño y cerrado recinto de la estación hace que el nivel de seguridad en Albena sea muy alto. Además, el sistema de permisos aquí es bastante estricto y el perímetro está estrechamente vigilado por la policía. El territorio del balneario está bien vigilado. La seguridad de usted y de sus hijos mientras nadan desde las torres está vigilada por socorristas atentos (a veces incluso excesivos).
Quizá el principal peligro para los veraneantes lo planteen las catástrofes naturales repentinas. Sin embargo, la experiencia demuestra que en tales casos las autoridades locales actúan con gran fluidez y prontitud.
Para asegurarse de que nada estropee su estancia en Albena, tenga en cuenta dos cosas:
- Estudie bien los tipos de cambio: puede haber diferencia entre el que figura en el cartel de la calle y el del mostrador interior;
- no beba agua del grifo. No olvides comprar agua embotellada y beber unos 2-2,5 litros al día, porque hace calor.