El trayecto de un lugar turístico a otro y de la playa al hotel puede convertirse fácilmente en un fascinante recorrido por Albena. Los huéspedes son trasladados en un tren improvisado compuesto por pequeños vagones unidos a un coche eléctrico.
También es fácil encontrar una estación de autobuses desde la que llevar a los visitantes del complejo a Varna y otras ciudades y pueblos cercanos. El viaje no lleva mucho tiempo, ya que todo está a 40 minutos en coche. Los veraneantes de Albena disponen de un guía para la excursión si lo solicitan.