Vamos a descubrir en qué se diferencian los resorts de Turquía, cómo se puede disfrutar del invierno y dónde se encuentran las huellas de las grandes civilizaciones en territorio turco. ¡Prepárate para descubrimientos inesperados y agradables sorpresas!
La multifacética Turquía, país de los cuatro mares. Para aquellos viajeros que prefieren el calor, la costa sur del mar Mediterráneo es ideal: por ejemplo, Marmaris o Antalya. La costa occidental de Turquía (Kuşadası y Bodrum) encantará a los jóvenes, mientras que el norte, con el mar Negro, familiar para los habitantes de Europa, es perfecto para aquellos que prefieren un clima suave. La frontera noroeste de Turquía está bañada por el mar de Mármara. Los resorts de esta zona, como Armutlu, Yalova, Erdek e İznik, son famosos por sus mercados de pescado y balnearios.
La relación óptima entre precio y calidad alegrará a los turistas en los resorts invernales de Uludağ, Kartalkaya, Palandöken y muchos otros. La temporada de esquí y snowboard está abierta de diciembre a marzo.
Pero Turquía también ofrece inagotables oportunidades para actividades al aire libre (buceo, parasailing, yachting y mucho más), numerosos eventos culturales, una naturaleza asombrosa y la milenaria historia de los imperios Otomano, Bizantino y Romano, que aún se conserva en piedra.
Unos agradables e indiscutibles beneficios son el régimen sin visado, vuelos directos y accesibles desde Europa, así como precios económicos para alojamiento y alimentación.
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