Las rutas de senderismo de Tossa de Mar son las más populares, ya que la ciudad es pequeña y todos los lugares de interés se pueden ver fácilmente paseando por sus calles. La ruta de senderismo más popular de Tossa de Mar recorre la escalinata de piedra de la caseta del guarda que conduce a la cima de un acantilado de 70 metros.
Allí se encuentra la principal atracción de la ciudad, Vila Vella. La fortaleza, construida en el siglo XII para protegerse de las incursiones de los piratas norteafricanos, hoy no se conserva en su totalidad, pero eso es lo que le da un sabor especial. En su territorio hay muchas plataformas de observación, monumentos y dos museos.
Uno cuenta la historia de los faros de la costa mediterránea. El otro es conocido popularmente como el Museo Marc Chagall. En él se exponen cuadros del artista y algunos objetos históricos de la ciudad.
Para los amantes de la naturaleza, en los alrededores de Tossa de Mar se organizan rutas de senderismo a las montañas de los alrededores. Las rutas de senderismo tienen entre 5 y 15 kilómetros de ida. También hay rutas al parque botánico Sa Riera.
Las rutas de senderismo en Tossa de Mar pasan necesariamente por el territorio del casco antiguo. Aquí se conservan las casas de piedra de antaño, que aún transmiten el espíritu de la España medieval. Si las rutas habituales por Tossa de Mar le aburren, basta con caminar por el paseo marítimo bordeado de palmeras Passeig del Mar. A un lado está la playa principal de la ciudad, y al otro, una hilera de cafés y restaurantes donde relajarse y disfrutar del azul del Mediterráneo.