¿Dónde está Sitges?
El municipio de Cataluña, la provincia de Barcelona, la orilla arenosa del cálido mar Mediterráneo: ahí es donde está Sitges. A sólo 36 kilómetros de Barcelona, Sitges tiene una extensión de casi 44 km² y hay suficiente fiesta y diversión para todos en cantidades ilimitadas. Probablemente sea por eso por lo que tanta gente de otros países ha acudido en masa a la ciudad.
La población de Sitges casi se ha duplicado en los últimos diez años y se ha vuelto multicultural. En la actualidad, cerca de un tercio de los residentes son inmigrantes del Reino Unido, Escandinavia, Francia y los Países Bajos. La creciente popularidad del complejo provocó un salto en los precios de la vivienda en 2008. Hoy es prácticamente la ciudad internacional de España con los precios inmobiliarios más altos del país.
Sitges: de neandertales a miembros de una orientación no convencional
Es poco probable que alguien pueda dar una fecha exacta de la fundación de Sitges. Las excavaciones arqueológicas indican que la zona ya estaba habitada en el siglo VI antes de Cristo. A principios de nuestra era se construyó aquí una villa romana. El propio nombre de la ciudad indica que aquí se almacenaban cereales. Sitges significa "foso profundo" en catalán.
En el siglo XI, la campiña circundante estaba repleta de varios castillos, alrededor de los cuales fueron brotando poco a poco pequeñas ciudades. Sitges no fue una excepción. Éste y otros castillos estaban bajo la autoridad del castillo de Ribes. Pero desde 1308 los derechos sobre el castillo de Sitges pasaron de un propietario a otro.
El más importante de ellos fue Bernat de Fonoyar, que fundó en la ciudad el hospital de Sant Joan Baptista. Como Fonoyar no tenía herederos, cedió el castillo a la comunidad religiosa de La Pia Almonia. Pero durante otros 300 años después estuvo demostrando constantemente su derecho a poseer el castillo. Y las guerras de los siglos XVII y XVIII ajustaron significativamente su aspecto y defensa.
Pero desde los años 60 del siglo pasado, la ciudad se convirtió gradualmente en un centro de contracultura. Desde 1968, por ejemplo, se celebra aquí el festival de la Semana Internacional de Cine Fantástico. Fue uno de los primeros eventos cinematográficos en mostrar ciencia ficción y terror. Y desde los años 90, la ciudad se ha convertido en un centro de vacaciones para personas de orientación no tradicional de toda Europa.
