El transporte público en Portugal está bien desarrollado, sobre todo en las grandes ciudades. Los tranvías y los autobuses son los medios de transporte más cómodos. Si quiere experimentar el espíritu de Portugal, no se pierda la oportunidad de montar en el tranvía 28 de Lisboa.
La capital de Portugal también tiene metro, pero es relativamente pequeño y no muy extenso. En otras ciudades, encontrará vías de tranvía que a veces van bajo tierra.
En cuanto al transporte público en el país, merece la pena prestar especial atención al transporte fluvial. Muchas ciudades cuentan con servicios de transporte fluvial que trasladan a la gente de una orilla a otra. Además, debido a la singular orografía de algunas ciudades, encontrará un importante número de funiculares, ascensores y montacargas, considerados aquí verdaderas obras de arte.
En las islas, las opciones de transporte público no son tan diversas. La gente viaja principalmente en autobús o taxi. Los billetes de autobús y tranvía se compran directamente al conductor. Un billete sencillo suele costar unos 2 EUR, pero suele ser más rentable adquirir una tarjeta de transporte.