Lituania difícilmente puede considerarse un país excesivamente activo, apto para el esquí o el mar extremo. Sin embargo, hay muchas oportunidades interesantes para los jóvenes.
Lituania difícilmente puede considerarse un país excesivamente activo, apto para el esquí o el mar extremo. Sin embargo, hay muchas oportunidades interesantes para los jóvenes.
Vilna, con su vida nocturna, clubes, cafeterías y restaurantes, es perfecta para quienes disfrutan de un ambiente animado. Esta capital europea celebra la Navidad y el Año Nuevo a lo grande, por lo que muchos eligen venir precisamente en esta época.
Palanga se considera un balneario marítimo ideal tanto para vacaciones familiares como para jóvenes. Hay excelentes campamentos turísticos para todos, y para quienes buscan diversión, abundan los bares y discotecas.
En Druskininkai, los jóvenes encontrarán muchas opciones de entretenimiento: la ciudad se ha desarrollado activamente en los últimos años, ofreciendo cada vez más actividades.
Kaunas merece una visita para quienes se interesan por la historia y prefieren un descanso más tranquilo. No obstante, aquí suelen organizarse diversas excursiones para estudiantes.
Las vacaciones de invierno son excelentes en cualquiera de las estaciones de esquí del país, y los jóvenes aprecian mucho esta oportunidad. Así que no dudes en visitar las páginas dedicadas al turismo de esquí.