Viajar a Tokio con un niño es una gran idea, sobre todo si se planifican cuidadosamente los itinerarios de viaje.
La diversión para niños en Tokio nunca termina:
- Para iniciarse en el mundo animal, visite el zoo de Ueno, hogar de más de 2.600 animales. Se puede dar de comer y acariciar a los animales. Dos veces al día, el zoo ofrece visitas guiadas de 45 minutos;
- Para vivir aventuras inolvidables está el Parque Nacional de Nikko. En el recinto, puede disfrutar navegando en un barco turístico por el Chunzenji, haciendo rafting en el río Kinugawa y viajando en el teleférico Akechidaira.
Para ver al menos la mitad de los monumentos de Tokio, hay que vivir en ella al menos varios meses... Pero también puede obtener su ración de impresiones inolvidables durante una visita más breve: en una exposición, en un colorido festival de temporada o en un viaje turístico.