Tokio es una metrópolis bulliciosa donde los edificios ultramodernos se yuxtaponen con estructuras antiguas. Cada distrito de la ciudad es único e interesante, y completamente diferente de los demás.
En primer lugar, te recomendamos visitar el Palacio Imperial, rodeado por los parques Higashi-Gehen y Kitanomaru.
Entre los edificios religiosos, deberías prestar atención al templo Tosegu, la Catedral Ortodoxa de la Resurrección de Cristo y el templo de la diosa Kannon.
Las colecciones del Museo de Historia Edo-Tokio, el Museo de Ciencia e Innovación "Miraikan" y el Museo "Shitamashi" son interesantes.
Obviamente, deberías subir al mirador de la Torre de Tokio, considerado el mejor de la ciudad. La vista desde aquí es hermosa tanto de día como de noche. El helipuerto de Roppongi Hills también ofrece una vista magnífica (tarifa de entrada). El mirador gratuito se encuentra en la torre que corona el Edificio de la Prefectura de Tokio.
Si deseas algo fuera de lo común, dirígete al Centro de Información sobre Terremotos Ikebukuro Bosai-Kan. ¡Solo aquí puedes experimentar un terremoto de magnitud 7 y estar garantizado de sobrevivir! Las clases son gratuitas para todos.
