La cocina nacional de Francia se caracteriza por su extrema diversidad. Dependiendo de la región, se utilizan determinados ingredientes en la preparación de los platos. A pesar de ello, el vino y el queso se consideran productos esenciales de la cocina francesa. Se utilizan tanto como aditivo de platos tradicionales como pueden constituir un alimento independiente.
En la región de Auvernia, donde se encuentra Vichy, se crían vacas de raza Célère para producir leche con la que se elaboran los quesos Cantal y Salers. Entre las especialidades tradicionales de Vichy destaca el Jambonsec d'Auvergne, un sabroso jamón enlatado.
Las Carottes Vichy -zanahorias glaseadas- se consideran el mejor plato regional, así como los Cepesfarcis -setas porcini rellenas de jamón y ajo-. No menos deliciosas son las críticas sobre las lentejas verdes de Puy, la col rellena, la olla de Auvernia con carne y verduras estofadas o la patata trufada. Todas estas abundantes delicias se complementarán a la perfección con los vinos locales: Saint-Pourcain, Cotes d'Auvergne o Chanturgue rosado.