Para disfrutar al máximo de las pistas de Val Thorens, primero es necesario aclimatarse y acostumbrarse a su altitud. Una vez que descubras las impresionantes vistas desde los miradores locales, podrás comenzar a explorar las pistas. Lo más agradable es que la nieve se mantiene durante la mayor parte del año, y gracias a los glaciares, es posible esquiar incluso en verano.
Las posibilidades deportivas de esta estación de esquí no se limitan al esquí o al snowboard. Aquí se puede realizar un paseo en helicóptero, disfrutar de una pista de trineo de 6 km, practicar esquí de fondo en una pista de dificultad media, visitar un snowpark, una pista de boardercross, una pista soleada, un club acuático, varios centros deportivos y zonas de juegos para niños.


