En Qingdao, puede estar tranquilo respecto a su seguridad, derechos y pertenencias, ya que la ciudad presume de un alto nivel de seguridad. Hay cámaras de vídeo por toda la ciudad, incluso en los árboles. Aunque no las vea, es probable que estén ahí. Este hecho suele disuadir a los posibles ladrones y ha reducido considerablemente los índices de robos. Las calles de Qingdao son patrulladas regularmente por agentes de policía siempre dispuestos a ayudarle.
Los hoteles de la ciudad cuentan con guardias de seguridad para garantizar su seguridad, y puede optar por una habitación de hotel equipada con caja fuerte para mayor tranquilidad respecto a sus pertenencias.
El único aspecto con el que hay que tener cuidado es con los vendedores y otros turistas. Sea diligente al comprar para evitar ser víctima de estafas, y vigile sus pertenencias cuando interactúe con otros turistas.