A pesar de que las principales atracciones y puntos de interés de Natal están bastante dispersos, las rutas de senderismo siguen siendo populares.
Si no está seguro de por dónde empezar su itinerario de senderismo en Natal, el primer lugar que debe visitar es el insólito árbol del anacardo, que tiene cerca de 200 años y se extiende a lo largo de 500 metros de ancho. Los entusiastas de la fauna marina pueden trazar su ruta en Natal a través del oceanario local, donde podrá observar no sólo acuarios que albergan tiburones, pirañas, rayas, langostas y pingüinos, sino también un serpentario dedicado a una gran variedad de serpientes y reptiles.
Explorar Natal a pie es una forma maravillosa de sumergirse en la impresionante naturaleza de este centro turístico brasileño y apreciar los auténticos edificios que han perdurado desde la época colonial. Si planea una ruta a pie por Natal, no se pierda el faro de 37 metros, al que se llega subiendo 150 escalones hasta la cima.
