Brujas es uno de los centros turísticos más importantes de Flandes Occidental, una de las provincias de Bélgica. Durante siglos, la ciudad ha conservado su apariencia inalterada: estrechas calles adoquinadas, antiguos templos monumentales y fachadas intrincadamente talladas de coloridas casas, todo rodeado por el suave flujo de tres canales que le han valido a la ciudad el apodo de "Venecia del Norte". El centro histórico de Brujas tiene forma de óvalo, extendiéndose de norte a sur, un reflejo del desarrollo histórico único de la ciudad.
A pesar de su tamaño relativamente pequeño, explorar todos los lugares de interés de Brujas en un solo día es una tarea imposible. La ciudad cuenta con una abundancia de edificios religiosos, que van desde pintorescas capillas hasta el renombrado Beguinaje, un complejo de casas, iglesias y la residencia de la abadesa. Esta área se considera una de las más bellas de Europa y está protegida por la UNESCO. Un lugar particular de peregrinación para los turistas es la Torre Belfort, que ganó fama gracias a la película "En Brujas".
Sin embargo, Brujas no se trata solo de arquitectura histórica. La ciudad también es famosa por sus encajes, chocolate y cerveza belga, con museos dedicados a celebrar estos tesoros locales. Las autoridades han tomado medidas para garantizar que los turistas puedan disfrutar plenamente de la atmósfera de la ciudad, incluyendo restricciones al tráfico de automóviles, lo que la convierte en un destino más amigable para los peatones.