Esta ciudad puede llamarse sin miedo a equivocarse la capital culinaria de EE.UU., porque los restaurantes no sólo abundan, sino que abundan mucho.
¿Qué es lo primero que hay que probar en San Francisco? Al estar frente al mar, casi todos los establecimientos locales ofrecen una amplia variedad del marisco más fresco. Pescado, mejillones, gambas y mucho más. Es para abrir los ojos.
Pero entre todo este esplendor destacan los cangrejos Dungeness, de carne blanca y tierna y sabor dulce. Se sirven solos o como parte de otros platos. Imprescindible probarlos.
En casi toda la ciudad se puede pedir también clam chowder, una sopa de almejas que también contiene leche, apio, cebolla y patatas. Se sirve en un "plato" de pan agrio. Es abundante, sabrosa y barata.
En San Francisco se pueden degustar platos de casi todas las naciones del mundo. Por ejemplo, en el Mission District encontrarás cocina mexicana: enormes burritos Mission (que incluyen alubias, salsa de guacamole, crema agria, carne y verduras, arroz), tacos (tortillas con varios rellenos), fajitas (tortillas con carne y verduras a la parrilla) y mucho más.
En la zona de North Beach hay restaurantes italianos. Además de la pizza tradicional, pruebe el filete marinado picante servido con ajo, anchoas y aceite de limón.
Diríjase a Chinatown para saborear la cocina china. Aquí le ofrecerán una gran variedad de dim sum (aperitivos ligeros rellenos de carne, verduras y marisco, que se fríen o se cuecen al vapor).
San Francisco también hará las delicias de los entendidos en vinos, porque en el estado de California, donde se encuentra la ciudad, se concentra el 90% de todos los viñedos de Estados Unidos. Así que se le ofrecerán vinos para todos los gustos.
Y para los más golosos, está el chocolate local Ghirardelli, que se produce desde 1852. Hay varias tiendas especializadas en San Francisco, donde le ofrecerán este manjar con diferentes sabores. Entre los más inusuales están el caramelo con sal marina y el caramelo con sabor a calabaza picante. Una tableta de este chocolate será un recuerdo maravilloso.