Es difícil imaginar que antaño este bullicioso centro político y económico alemán no era más que un pequeño pueblo de pescadores. Hoy, Düsseldorf tiene una población de unos 600.000 habitantes, lo que la convierte en la séptima ciudad más grande de Alemania.
Todo empezó como un pequeño asentamiento a orillas del Rin. Por cierto, si se pregunta dónde se encuentra Düsseldorf en el mapa de Alemania, verá que está situada en la parte occidental del país. Düsseldorf no es sólo una ciudad, sino también la capital del estado federado de Renania del Norte-Westfalia.
Düsseldorf se fundó en 1135, pero no recibió el estatus de ciudad hasta mucho más tarde, en 1288. El famoso Federico Barbarroja desempeñó un papel importante en el desarrollo de la ciudad. Fue durante su reinado cuando la pequeña ciudad de Kaiserswerth obtuvo el control total de la parte baja del río Rin.
A partir de ahí, la ciudad experimentó un rápido crecimiento y pronto se enriqueció gracias a sus actividades mercantiles. Durante las guerras napoleónicas sufrió importantes trastornos. Como muchas ciudades alemanas, sufrió graves daños durante la Segunda Guerra Mundial y quedó casi completamente destruida.
La restauración de la ciudad comenzó en 1946, y pronto Düsseldorf recuperó su antiguo poder y reputación como centro económico.