Explorar los distritos históricos y monumentos de Copenhague es una maravillosa manera de experimentar la rica herencia de la ciudad. Indre By, con sus antiguos edificios y calles estrechas, ofrece un vistazo al pasado de la ciudad. Los canales de Christianshavn y la única "ciudad libre" de Christiania proporcionan un contraste interesante. No olvides visitar el distrito de Østerbro con la Ciudadela de Kastellet y el vibrante área de Vesterbro con sus cafés y bares.
Nyhavn, conocido por su atmósfera colorida, es un lugar de visita obligada. Y, por supuesto, ver la icónica escultura de La Sirenita en la entrada del puerto es una actividad imprescindible, accesible a través de trenes suburbanos.
El Palacio de Amalienborg es una joya real, donde puedes presenciar la ceremonia del cambio de guardia alrededor del mediodía. ¡Es una ciudad llena de historia y cultura que espera ser explorada!