Hoi An, la ciudad portuaria, es un destino fascinante por derecho propio y sirve como un encantador cruce turístico. Cuenta con 844 edificios catalogados por la UNESCO, creando una atmósfera única del antiguo Vietnam.
Paseando por el centro de la ciudad, encontrarás tiendas de una sola planta, pequeñas pagodas, puentes arqueados, talleres y antiguas casas residenciales que transforman tu caminata en una auténtica aventura oriental. El encanto de Hoi An hace difícil concentrarse en una sola cosa, dejándote con ganas de explorar más.
Aunque Hoi An cuenta con un rico patrimonio, también abraza nuevas atracciones arraigadas en artesanías tradicionales. El Pueblo de la Seda y varias tiendas donde puedes comprar productos elaborados por artesanos de la seda ejemplifican estas innovaciones.
Desde Hoi An, puedes aventurarte a los islotes cercanos donde puedes disfrutar de tomar el sol, nadar, bucear y relajarte en paz. Un viaje a las Montañas de Mármol, conocidas por su belleza natural, también es imprescindible cuando visitas Hoi An.
El carácter vibrante y colorido de la ciudad es indescriptible; se siente como retroceder en el tiempo varios siglos, descubriendo las capas de su rica historia. La mezcla única de influencias vietnamitas, chinas y japonesas en Hoi An es una maravilla que debe ser experimentada de primera mano.