Visitar Verona merece la pena sobre todo para admirar sus plazas, puentes, palacios medievales, castillos y estructuras de templos. La mejor manera de conseguirlo es a través de rutas a pie por Verona.
Si tiene un presupuesto limitado y no está dispuesto a gastar en un guía, es una buena idea planificar de forma independiente una ruta turística tentativa por Verona, marcando los lugares que considere de visita obligada.
No deje de visitar el Castel San Pietro, que ofrece un excelente mirador. Aquí podrá tomar hermosas fotos de recuerdo, y ver toda la ciudad desde arriba puede facilitarle el ajuste de sus rutas por Verona.
Pasee por la orilla del río Adigio y admire los monasterios locales, los castillos y, por supuesto, los puentes: Ponte Scaligero, Ponte Garibaldi, Ponte Pietra y Ponte Navi. No se niegue el placer de pasear por las encantadoras callejuelas de Verona: realmente merecen la pena.
Cualquier ruta de senderismo en Verona conduce inevitablemente a la Piazza delle Erbe (también conocida como la Plaza de las Hierbas). Aquí podrá fotografiar la fuente de la Madonna Verona, las torres Lamberti y Gardello, así como estatuas y una columna con un león alado a la entrada del Palacio Maffei. Si quiere dar un paseo tranquilo, intente madrugar, ya que así evitará encontrarse con multitudes de turistas. Un paseo nocturno por Verona es igualmente cautivador, y los guías locales ofrecen programas de este tipo a partir de 100 EUR por grupo.