El principal medio de transporte de la ciudad son los remontes. Éstos le llevan a la pista adecuada, al descenso o al hotel en un abrir y cerrar de ojos. También hay autobuses que le llevan por la resort.
La vecina ciudad de Zermatt, en particular, tiene fama de ser respetuosa con el medio ambiente. Por ello, viajar en transporte sólo es posible si se es propietario de un coche eléctrico. Las dos ciudades están conectadas por un servicio regular de autobuses. En sólo 15 minutos se puede ir de un punto a otro sin problemas.
Para los trayectos de larga distancia, hay autobuses a Turín y Milán, así como trenes a la cercana estación de Châtillon.