Jordania es un país que tiene el poder de cautivar, al igual que la historia de la humanidad es imposible de ignorar. Sus paisajes desérticos, oasis y reservas naturales tienen un encanto innegable. Las cálidas aguas del Mar Rojo acarician playas prístinas, mientras que las propiedades terapéuticas de la sal del Mar Muerto son realmente notables. Los coloridos mercados orientales resuenan con el mismo espíritu que hace mil años. Además, Jordania está bien preparada para sorprender a los visitantes con sus modernas comodidades y excelentes instalaciones turísticas.