La ciudad rica y próspera surgió del bastión romano del siglo II a.C. Alberga una de las universidades más antiguas de Europa, con 25 bibliotecas y 16 cines, así como más de 75 km de carriles para bicicletas. Al mismo tiempo, se han conservado monumentos de siglos pasados, capaces de sumergir a los viajeros en la atmósfera del pasado.
Para los aficionados a los monumentos religiosos arquitectónicos, Módena ofrece una variedad de antiguas iglesias de diferentes denominaciones. Vale la pena visitar la Iglesia de San Francisco (Chiesa di San Francesco), que se considera una de las iglesias franciscanas más antiguas del mundo (construida en 1244).
Para aquellos interesados en los coches de lujo, cerca de la ciudad de Maranello se encuentra la sede de Ferrari. En Módena, puedes encontrar la oficina de otro conocido fabricante de coches de lujo, Maserati. Sin embargo, es poco probable que veas estos coches en las calles de la ciudad, ya que las bicicletas y los scooters dominan la escena.
Módena
Cuna de las delicias italianas
Modena está rodeada de muchas fábricas que producen motores para los coches deportivos más famosos de Italia. Y detrás de esta frontera poco atractiva se esconde un centro medieval lleno de palacios, catedrales y torres que han sido designados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Enzo Ferrari (fundador de Ferrari), el gran tenor Luciano Pavarotti y productos alimenticios populares (tortellini, lambrusco, vinagre balsámico y parmesano) son todos de aquí.
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